sábado, 31 de diciembre de 2016

El Consejo del Real Betis Saca Adelante la Junta General y Seguirá al Frente de la Entidad


   El actual Consejo del RBB ha sacado adelante la Junta General de Accionistas celebrada en la tarde-noche de hoy en el hotel Silken Al-Andalus de la capital hispalense. Presentando como argumento fundamental el miedo al pasado tenebroso del club, la opción de Haro y Catalán ha alcanzado mayor respaldo que hace un año para aprobar las cuentas del club, la gestión del club y la absorción de las secciones de baloncesto y fútbol sala. El apoyo del beticismo al actual consejo se alcanzó en medio de un ambiente de tensión, cruces de declaraciones y a pesar de la desastrosa planificación deportiva, que debe ser el área donde los rectores deben depositar sus cinco sentidos. En este sentido, un grupo de Supporters aguardaba en la puerta del hotel con una pancarta que rezaba "Por un Betis grande, no más mediocridad".

   Los cinco primeros puntos de la junta se aprobaron con porcentajes a favor superiores al 27% del capital social representado, tal y como se puede leer ↝aquí. A la conclusión de la Junta, Haro declaró que "hemos entendido el descontento con la marcha deportiva. Hay que enderezarla y nos vamos a dejar el alma para ello. Aceptamos con responsabilidad el voto de confianza recibido, solo nos queda seguir trabajando para no defraudar a tantos béticos que nos han dado su apoyo." Es cierto que al beticismo no se le pasa por la cabeza regresar a los tiempos de Farusa o Bitton pero la afición debe ser lo suficientemente lista como para no tragar con la desastrosa gestión deportiva emprendida por el Consejo que hoy ha logrado el favor de los suyos para dirigir los designios de una entidad demasiado castigada por los intereses personales. Una vez finalizada la asamblea, el presidente valoró ante los medios el desarrollo de la misma, refiriéndose a la unión del beticismo, las propuestas para 2017, refuerzos y renovaciones. La web del club realizó un resumen de las declaraciones del mandatario verdiblanco que puede leerse aquí.

viernes, 23 de diciembre de 2016

Fabián Cierra su Ampliación de Contrato hasta 2020 antes de Salir Cedido al Elche CF


   Tal y como habían anunciado varios medios de la ciudad, Fabián saldrá cedido al Elche CF hasta final de la presente temporada. El club ha hecho oficial la noticia este mediodía, señalando que el canterano ha ampliado previamente su vinculación con el conjunto verdiblanco hasta junio de 2020. Veremos si el jugador palaciego encuentra en el cuadro ilicitano los minutos que precisa para dar ese salto de calidad necesario para hacerse un hueco en la máxima categoría.

miércoles, 21 de diciembre de 2016

Deportivo vs Betis (3-1)


   El RBB ha caído eliminado esta noche de la Copa del Rey tras caer en Riazor ante el Deportivo por tres goles a uno. El cuadro coruñés remontó el resultado adverso de la idea con cierta facilidad y mandó a la lona a las primeras de cambio a los heliopolitanos, afianzando aún más el sentimiento de hastío, hartazgo y pasotismo generalizado dentro del beticismo. La fragilidad defensiva concedió demasiado opciones en área propia a un conjunto deportivista que cocinó a fuego lento su pase . Los locales hurgaron con destreza en la de sobra conocida falta de contundencia que caracteriza a los hombres de Víctor y machacaron sin piedad las esperanzas que algunos teníamos depositadas en el torneo copero.

   No salió del todo mal el Betis al partido, con su habitual línea defensiva de cinco, una medular formada por Donk, Petros y Ceballos y una dupla atacante compuesta en esta ocasión por Sanabria y Alegria. Víctor decidió dejar en el banquillo a Rubén Castro, situación que nunca acabaremos por entender. En el primer minuto del choque inquietó Piccini por su banda, aunque su centro fue desbaratado por Arribas cuando Sanabria se disponía a rematar. El zaguero blanquiazul fue precisamente el que abrió el marcador a los diez minutos de partido, tras rematar a placer el centro de Fajr por una falta concedida por Piccini. Arribas se aprovechó de la displicencia de Bruno, que perdió la posición, la situación del balón y hasta la vergüenza. Las facilidades que otorga al rival una y otra vez el central tinerfeño debieran ser entendidas de una vez por todas por los técnicos como síntoma alarmante de incapacidad para seguir vistiendo la camiseta. Desaplicaciones como estas se pagan muy caras en este tipo de competiciones. Tras el gol, el cuadro bético se recompuso y logró imponerse sobre el verde de Riazor aunque la falta de puntería le privó de ponerse de nuevo por delante en el partido y en la eliminatoria. Durmisi, que cuajó una gran primera mitad, se marchó en carrera de su par y colocó un balón que Piccini, llegando en el segundo palo, estrelló contra el meta local. Minutos después, Ceballos asistió a Álex Alegria pero Rubén deshizo de nuevo el peligro cuando la situación del ariete extremeño era inmejorable para lograr la igualada. Y de nuevo Durmisi, deshaciéndose de Juanfran, asistió a Alegria pero su cabezazo se perdió por poco.

   El buen juego desplegado por el cuadro bético se vino completamente abajo tras el paso por vestuarios. Y así, antes de alcanzar la hora de partido, el Betis encajó dos goles más y sus posibilidades de alcanzar los octavos del torneo del KO quedaron reducidas casi a la nada. Primero sería Luisinho, de espectacular chutazo, el que batiría a Giménez tras recoger en la frontal un despeje de la zaga bética. Y prácticamente a renglón seguido, llegó el tercero, cuando Babel le ganó de forma indecente la posición a Piccini, controló con tranquilidad el centro de Juanfran desde la derecha y batió a placer a Giménez. Sin embargo, con la eliminatoria vista para sentencia llegó el tanto de Piccini, tras aprovecharse de la asistencia de Sanabria, que había recogido dentro del área un centro en semifallo de Durmisi. El tanto ponía la eliminatoria de nuevo al alcance pero el Betis no estuvo acertado en los más de veinte minutos que quedaban por delante. De nada sirvió que Joselu marrara una pena máxima cometida por Piccini. Hasta el final de la contienda solo pudimos contabilizar una ocasión por parte verdiblanca. El pase a los octavos estuvo en las botas de Rubén Castro, que recibió un buen centro de Ceballos, pero su disparo cruzado fue atajado abajo por un inspirado Rubén. Fin a la singladura copera. El bético se haya permanentemente esperando un cambio de viento. Pues bien,  esperemos que el Consejo, más pendiente ahora de vencer en la próxima Junta del próximo día 30, logré revertir la situación deportiva de una vez por todas el próximo año y dé carpetazo a una penosa situación que ya dura demasiado. Y sino, que adopten la postura que muchos ya consideran como la más idónea: que se marchen por donde han venido.

lunes, 19 de diciembre de 2016

Ceballos, En el Once de Oro de la Cantera del Fútbol Español


   El canterano del RBB Dani Ceballos ha sido incluído en el Once de Oro de la cantera del fútbol español, tras la reunión que ha mantenido hoy el Comité Técnico de Fútbol Draft en la Ciudad del Fútbol de las Rozas. El utrerano se ha hecho un hueco entre los jugadores nacionales con más proyección, junto a valores como Aarón Martín, Jesús Vallejo, Jorge Meré, Mikel Merino, Javier Ontiveros, Mikel Oyarzabal, Marco Asensio o Borja Mayoral. Además, José Carlos ha quedado encuadrado finalmente en el Once de Plata y Fabián en el Once de Bronce. En categoría femenina Paula Moreno ha sido seleccionado para formar parte del Once de Oro. 

viernes, 16 de diciembre de 2016

Deportivo Alavés vs Betis (1-0)


   El RBB ha vuelto a encolerizar a sus desengañados aficionados tras la nueva derrota cosechada esta noche en el estadio de Mendizorroza. El resultado llegó fruto de la sórdida propuesta bética en un choque donde el Alavés aprovechó su única ocasión para tumbar a un rival sin argumentos. Desde el extraño esquema propuesto por el técnico, ubicando de inicio a Álex Martínez en el costado derecho, supuestamente para frenar las acometidas del veloz Theo, hasta la ejecución desplegada en el frío verde vitoriano, el desencantado seguidor bético comprobó una vez más que las promesas de la directiva están muy lejos de cumplirse por propia ineptitud del que las lanza y que la planificación sigue sin dar sus frutos. El enésimo proyecto de equipo no parece mejorar a las anteriores versiones y el hastío (casi indiferencia) se está empezando a adueñar del entorno. Es cierto que se ha llegado a una situación en que cualquier movimiento en falso se analiza con un tremendismo desmesurado pero no es menos cierto que todo ello deriva de un transcurso de miserables temporadas en las que el equipo ha mezclado la mediocridad con el ridículo.

   Con el ya clásico 5-3-2 saltó el Betis al terreno de juego alavesista, tratando de presionar arriba e impedir la salida de balón del rival. Víctor propuso un dibujo con cuatro centrales, dos laterales largos, Ceballos y Joaquín por dentro y la dupla atacante compuesta por Sanabria y Castro. Los locales se prodigaron por banda con Femenía y Toquero en constante ebullición y, aunque el mayor dominio no generaba ocasiones claras de gol, pronto se comprobó que a los verdiblancos les costaba dar tres pases seguidos. Mediada la primera mitad el Betis comenzó a acudir al recurso del balón parado. Joaquín aprovechó el lanzamiento de una falta para colocar un balón en el interior del área al que a punto estuvo de llegar Donk, sin embargo la defensa se anticipó para despejar el peligro. Ceballos, muy solo en labores creativas, comenzó a echarse al equipo en la espalda y fue el único que propuso en la zona ancha del campo. Al canterano le quedaban también arrestos para multiplicarse en acciones defensivas y fue sin duda lo único positivo del encuentro. Superada la media hora, Adán tuvo que salir fuerte de puños para deshacer el peligro creado tras un mal despeje de Pezzella. Por momentos aparecía esa falta de contundencia defensiva y el equipo se veía en dificultades para alejar el balón de las inmediaciones del área. En el minuto 40 llegó la lesión de Joaquín. El extremo portuense se resintió de una molestia en la zona del sóleo y tuvo que ser reemplazado por Petros. Poco antes del final del primer tiempo, un activo Deyverson atinó a rematar un centro con el exterior de Ibai pero el balón se perdió junto al palo izquierdo de Adán. En el último minuto llegaría la jugada polémica del encuentro. Ceballos cayó en el interior del área y, aunque la repetición deja a las claras que el "10" bético fue trabado por Laguardia, el colegiado decidió no señalar señalar el punto fatídico. 

   A los pocos instantes de la reanudación Pacheco deshizo una clarísima ocasión de Castro, que no supo aprovechar el excelente servicio de Donk. La propuesta del Betis seguía pareciendo conformista y tacaña y poco antes de la hora de partido llegó la jugada que desniveló el encuentro. Toquero progresó por banda derecha y trazó un perfecto pase al que no llegaron ni José Carlos ni Mandi y Deyverson aprovechó para ejecutar a Adán. El delantero brasileño le ganó la partida a Mandi y volvió a evidenciar las carencias de una línea frágil en exceso para pretender un verdadero salto de calidad. Con media hora por delante para enderezar la situación el equipo no fue capaz de discutirle los puntos a un conjunto local que se bastó con cerrarse bien atrás. Zozulia suplió a Sanabria, que tuvo que abandonar con algunas molestias en la rodilla. El ucraniano, que volvió a la convocatoria en lugar de Álex Alegría, tiene todas las papeletas para pasar a los anales de la guasa sevillana como ya lo hicieron antes Fantaguzzi, O´Donkor, Meade, Tosic y un bochornoso etcétera. Piccini sustituiría a Álex Martínez en la recta final del encuentro, tramo al que se había llegado sin que los heliopolitanos lograran poner en riesgo la ventaja adquirida por los locales. Un disparo de Ceballos desde la frontal en el descuento, que llegó blandito a las manos de Pacheco, fue el escaso bagaje ofensivo bético para intentar al menos salvar los muebles. Octava derrota en dieciséis encuentros. #SoloHechos. 

domingo, 11 de diciembre de 2016

Betis vs Athletic Club de Bilbao (1-0)

 
   El RBB ha logrado esta noche una importantísima victoria ante el Athletic en Villamarín, gracias a un único tanto logrado en la primera mitad por Rubén Castro. Al margen de los puntos, de incuestionable valor en pos del objetivo de abandonar cuanto antes los puestos calientes de la tabla, el equipo ha ofrecido una más que aceptable imagen, sobre todo durante los primeros cuarenta y cinco minutos, que hace olvidar el esperpéntico paso de Gustavo Poyet por el banquillo verdiblanco. El cuadro heliopolitano se fajó con un compromiso practicamente inédito durante las últimas campañas, estuvo bien plantado en todas las áreas del campo, cerró espacios, y por momentos, generó un juego vistoso y vertical. Víctor Sánchez del Amo ha logrado en cinco partidos que su equipo sea reconocible. Este Betis no es nada del otro mundo pero al menos juega arropado desde atrás, en constante asociación, abre el campo por las bandas con dos laterales largos y exhibe profundidad gracias a la creación de Ceballos y a la asociación arriba de Castro y Sanabria, dos estiletes que empiezan a conocerse.

   Comenzó el Betis jugando en terreno de juego vizcaíno. El técnico bético volvió apostar por 5-3-2, un dibujo que en ocasiones tornaba a 4-4-2, incrustándose Donk entre los tres centrales, mientras Durmisi y Piccini se manejaban como extremos al uso. Por cierto, llamó la atención de nuevo la titularidad de José Carlos en el eje de la zaga, desbancando a Bruno del once. El canterano, abrigado en el buen entramado defensivo planteado por Víctor, mostró una imagen digna a pesar de tener que lidiar en más de una ocasión con la rapidez y la explosividad de un jugador como Iñaki Williams. En la zona ancha Joaquín "sustituyó" al sancionado Petros y en la punta el mister volvió a apostar, como no puede ser de otro modo, por la dupla Sanabria y Castro. El paraguayo poco a poco va demostrando los motivos por los que la secretaría técnica apostó fuertemente por sus servicios. En la noche de hoy el joven ariete sudamericano cuajó un enorme encuentro, estando presente en todas las peleas y desplegando una portentosa entrega que el bloque agradeció.

  Al filo del cuarto de hora de partido Laporte probablemente debió haber visto su segunda cartulina amarilla, en una jugada en la que el zaguero, tal y como demostraron posteriormente las imágenes de la retransmisión, agarró a Castro por la camiseta. Sin embargo, el que vería la cartulina sería el propio Rubén Castro, a juicio del colegiado, por simular un caída. Cierto es que el canario tal vez exageró en el movimiento, circunstancia esta que seguramente confundió al trencilla. A renglón seguido llegaría la jugada del único gol del partido, lance donde volverían a encontrarse los mismos protagonistas. Castro le ganó esta vez la posición al central francés del Athletic, cedió el balón a Sanabria y el paraguayo se la devolvió al canario, que, de primera, logró batir a Kepa. Laporte se quejó al final del choque de un empujón de Castro en la disputa del balón pero el colegiado ni tan siquiera hizo amago de discutir la validez del tanto. El gol, séptimo del curso para Castro, era el premio a la intensidad mostrada y a una actitud seria y sin fisuras. Minutos después, Williams disparó a puerta pero la acción aislada del extremo vasco fue abortada por Adán, muy seguro bajo palos. El Betis siguió exhibiendo recursos suficientes para mantener la ventaja en el marcador, neutralizando con solvencia los intentos del rival por nivelar la contienda. En los instantes finales, el Athletic merodeó el área bética y puso algo de suspense a los segundos finales pero Mateu Lahoz acabó indicando el camino de los vestuarios sin incidencias que reseñar de cara al electrónico. Ni los más viejos del lugar recordaban a un Betis tan intenso, solidario y vertical. Ceballos mostró su mejor versión, multiplicándose en defensa y ofreciéndose como brújula del equipo. Durmisi, tal vez algo alocado, inquietó por su banda, Pezzella echó el cerrojo y Castro situó el límite de su inmensa leyenda aún más lejos. Quede esto dicho para las generaciones venideras. 

   El paso por vestuarios no modificó en absoluto el guión. Ernesto Valverde se desesperaba en la banda, comprobando como la posesión del balón no le servía a su equipo para inquietar el marco de Adán. Alcanzada la hora de partido el Betis comenzó a acusar el esfuerzo y Víctor decidió mover el banquillo. Cejudo suplió a Piccini, al que el agotamiento le llevó a meterse en más de un lío con el balón en los pies. Además, el italiano había visto la amarilla en el primer tiempo y el técnico entendió que la pérdida de un efectivo hubiera trastocado seriamente los planes. Pocos minutos después sería Pezzella, lesionado, el que dejaría su sitio a Bruno. El argentino realizó un encuentro perfecto pero unas molestias musculares le impidieron continuar. Afortunadamente, la cosa quedó en un susto y fue el propio entorno del futbolista el que confirmó que se trataba solo de una pequeña deshidratación que en principio no le va a impedir jugar el próximo encuentro. Los minutos fueron transcurriendo en perfecta comunión con la grada, un público que con esta versión de su equipo si se siente orgulloso. A falta de diez minutos para la conclusión, Yeray impidió bajo palos el segundo tanto bético, que hubiera cerrado la contienda. Un balón colgado por Cejudo fue cabeceado por Sanabria, remate que llegó franco a Joaquín en boca de gol pero el portuense no acertó a rematar. En lo estertores del partido sería Donk el que remataría fuera incomprensiblemente un perfecto centro de Joaquín. Hasta el pitido final, muchos apuros por mantener la exigua ventaja en el marcador pero los tres puntos se quedaron con toda justicia en Heliópolis. El descenso queda ahora a seis. Joaquín intervino a la finalización del partido a pie de césped y, además de conceder una gran importancia a la victoria conseguida, reconoció que el equipo debe trabajar para lograr mayor posesión de balón, sabedor de que ello contribuirá definitivamente a un desgaste menor del bloque. O dicho en sus propias palabras, tener más la pelota para correr menos. Genio y figura.   

domingo, 4 de diciembre de 2016

Betis vs RC Celta (3-3)



   Betis y Celta han empatado esta mañana a tres goles en una desapacible y lluviosa mañana. El encuentro ha sido trepidante, espléndido para el espectador ya que ha contado con todos los ingredientes (goles, polémica y alternativas en el juego) para aderezar el espectáculo. Víctor propuso el mismo dibujo que tan buen resultado le otorgó en su debut como técnico del Betis, pretendiendo darle consistencia al bloque y cerrar bien los espacios. La zaga presentaba algunos cambios, con José Carlos en el lugar de Mandi, que fue reservado por Víctor, y Cejudo en el flanco diestro en sustitución del sancionado Piccini. El eje lo completaban Pezzella y Bruno, mientras que en el lateral izquierdo emergía de nuevo el danés Durmisi, tras su aceptable actuación en copa. El tridente de la medular era el formado por Donk, Petros y Ceballos y arriba buscaban el gol Sanabria y Castro. El técnico prefirió jugar de inicio con la dupla atacante y dejar en el banquillo a Joaquín.

   El encuentro comenzó con un Celta claramente dominador y un Betis agazapado que se afanaba para no dejar huecos y frenar el juego de la medular céltica. Los gallegos monopolizaban la posesión de balón pero lo hacían en zonas intrascendentes del terreno de juego. A los 10 minutos llegó la primera jugada importante del encuentro, cuando Bongonda se internó por banda izquierda y tuvo que ser frenado en seco por Donk, acción que le costó al holandés la tarjeta amarilla. La falta se lanzaría sin consecuencias pero al cuarto de hora llegó la jugada del primer tanto gallego. El balón cruzó el área bética de lado a lado hasta en dos ocasiones sin que los centrales pudieran deshacer el peligro, quedando al descubierto una vez más la fragilidad defensiva del equipo. El servicio de Bongonda desde la izquierda transitó delante de toda la línea defensiva, sin consecuencias, para llegar hasta el lado opuesto del área, donde apareció Wass, que la volvió a colocar a la espalda de los centrales para que Aspas, habilitado y libre de marca, la empujara a placer. Bruno volvió a quedar retratado en la enésima desaplicación defensiva, desatención que le costó muy cara al equipo. Bronca del respetable, desesperado ante la pobrísima propuesta de los verdiblancos en el inicio de partido. Hasta casi la media hora no llegó el primer intento del Betis de cara al marco de Rubén, a raíz de un lejanísimo disparo de Sanabria que el meta atrapó sin mayores problemas. Petros vio la tarjeta amarilla por una entrada a destiempo a Wass pero el empuje del brasileño junto a un espléndido Ceballos en labores creativas lograron cambiar la dinámica del encuentro. Los béticos adelantaron las líneas de presión y lograron robarle la posesión al Celta, fruto de lo cual consiguió cercar el área rival. En las postrimerías del primer acto Petros fue objeto de un claro penalti, tras ser literalmente interceptado dentro del área por Fontás. La pena máxima fue ejecutada a la perfección por Castro y con la igualdad en el luminoso se llegó al final de la primera mitad.

   La tibieza con la que el RBB afrontó el inició del encuentro contrastó con una actitud más valiente tras el paso por vestuarios, dando un paso al frente y no manteniéndose a la expectativa. Víctor retiró del partido a Bruno y colocó en el terreno de juego al canterano Rafa Navarro, dejando una defensa de cuatro. Rubén Castro, al palo, y Durmisi, estuvieron a punto de poner a los suyos por delante. El fantástico arranque de segundo tiempo fue refrendado con el gol de Sanabria, que aprovechó el extraordinario pase al hueco de Rubén Castro y, tras deshacerse del meta vigués, logró poner el esférico en el fondo de las mallas. Los verdiblancos lograron algo casi impensable durante la mayor parte del primer acto, tener noqueado al rival a base de juego y actitud, presión alta y ocasiones. Sin embargo, Aspas detuvo la reacción con su segundo zarpazo, aprovechando la llegada hasta la línea de fondo de Bongonda para rematar a placer ante la pasividad de la defensiva. Fue José Carlos en esta ocasión el que flaqueó en la marca y el delantero de Moaña devolvió la igualada al marcador. Acto seguido, Joaquín reemplazó a Sanabria y precisamente una acción del portuense dio origen al tercer gol bético. La jugada llegó precedida de un cabezazo de Pezzella que Rubén desvió a córner con muchos apuros, algo que no pudo repetir tras el lanzamiento de esquina. El propio zaguero argentino logró rematar con autoridad el perfecto lanzamiento de Joaquín para colocar al equipo de nuevo en franquicia, con un cuarto de hora por delante. El agua había caído con fiereza durante casi todo el choque pero el terreno de juego no se vio en ningún momento afectado. Berizzo decidió colocar toda la pólvora del mundo arriba, con las salidas al campo de Sisto y Rossi. El Betis pudo cerrar el partido en varias ocasiones, sobre todo tras una llegada de Durmisi que cedió a Castro pero el canario, sin apenas espacio, no atinó a definir. El rechace lo recogió Ceballos llegando desde atrás pero, con todo a favor, envió el balón fuera. Del posible 4-2 pasamos al 3-3, obra de Roncaglia en una acción en la que el zaguero remató completamente a placer un perfecto servicio desde la esquina de Wass. Una vez más las desaplicaciones defensivas destrozaban los planes de victoria. Quedaban cinco minutos más el descuento pero ya no habría más ocasiones de mover el marcador. El empate final dejó mejor sabor de boca al equipo visitante que, a pesar de adelantarse muy pronto, vio como el rival volteó el partido tras una gran reacción colectiva. Desafortunadamente, la falta de contundencia atrás le negó la victoria al Betis. 

martes, 29 de noviembre de 2016

Betis vs Deportivo (1-0)


   El RBB se ha impuesto esta noche por la mínima al Deportivo de la Coruña en el encuentro de ida de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey disputado en el Benito Villamarín con algo menos de 20.000 espectadores en las gradas. El triunfo llegó merced a un gol anotado en la primera mitad por Sanabria, que de este modo estrenaba su faceta goleadora desde que llegara el pasado verano. Los hombres de Víctor estuvieron muy espesos casi toda la noche pero supieron maximizar el tanto del ariete paraguayo, lo cual les permite afrontar la vuelta con esa pequeña ventaja adquirida. El técnico bético no dudó en acudir a las rotaciones para encarar el encuentro y dejó sin convocar a muchos de los habituales en el campeonato liguero (Adán, Castro, Petros, entre otros), confeccionando un once plagado de teóricos suplentes. Así, los heliopolitanos saltaron al verde de Villamarín con Giménez bajo el marco; una defensa de cinco conformada por Durmisi y Piccini en los costados y Mandi, José Carlos y Donk en el eje; la medular estaba compuesta por Brasanac, Jonas y Gutiérrez, mientras que en labores atacantes comparecieron Álex Alegría y Sanabria.

   Los locales comenzaron el encuentro con entusiasmo, llevando la iniciativa aunque sin inquietar las inmediaciones del marco rival. La primera jugada de peligro real llegó pasado el cuarto de hora de juego y desembocó en el único tanto del partido. Durmisi se deshizo en velocidad del ex bético Juanfran y colocó desde el costado un balón medido a la testa de Sanabria que no desaprovechó para batir a Rubén. El propio Sanabria pudo haber engrosado su cuenta algunos minutos después en un balón que quedó suelto dentro del área pero el balón fue desviado in extremis por la zaga. Con el resultado en contra el Deportivo intentó restablecer la igualada pero, unas veces gracias a las intervenciones de Giménez, atinado toda la noche, y otras, por obra de la fortuna, el marcador no se movió. Juanfran lo intentó desde su casa mediante un potente disparo que obligó a Giménez a realizar una acrobática estirada. Minutos después, Sidnei, completamente solo, cabeceó fuera junto al palo izquierdo cuando ya se cantaba el empate.

   El segundo acto comenzó con un Deportivo mandón que se fue decididamente a por la igualada. Víctor decidió entonces reestructurar la medular, para lo cual retiró a Sanabria del partido y colocó a Bruno en la zaga. Fue entonces cuando Donk adelantó su posición para intentar frenar las embestidas gallegas y darle salida al balón. Víctor ha encontrado en el holandés al comodín que el equipo precisaba y esta noche ha vuelto a ser uno de los más destacados. El técnico deportivista movió el banquillo para intentar lograr ese tanto que les hubiera puesto la eliminatoria en franquicia pero el Betis se mantuvo firme en defensa. Aún así, Joselu, a los pocos minutos de ingresar en el terreno de juego, lo tuvo todo a favor para batir a Giménez pero su testarazo se marchó ligeramente desviado. Victoria final bética y la eliminatoria tendrá que resolverse en Riazor. Segundo encuentro casero con Víctor en el banquillo, segunda victoria. Además,  el equipo volvió a dejar la puerta a cero. Detener la sangría que había en defensa y dotar de mayor estabilidad a las líneas es una buena forma de empezar a construir un equipo. No obstante, el técnico ya sabe de primera mano que el talón de aquiles del equipo es la falta de frescura en ataque, faceta donde el Betis sigue flaqueando. Y de qué manera.  

viernes, 25 de noviembre de 2016

SD Eibar vs Betis (3-1)


   El nombrado ya por muchos como Betis de la indiferencia volvió esta noche a las andadas, tras caer en Ipurúa ante el cuadro local (3-1) y ofrecer una imagen quebradiza y medrosa. Es cierto que el colegiado de la contienda colaboró sensiblemente para que la batalla quedara desnivelada casi desde el principio pero es también incuestionable la escasa capacidad de resistencia mostrada para sobreponerse al golpe. El cuadro verdiblanco queda descompuesto siempre que una contingencia trastoca los planes iniciales y esta noche quedó constancia de ello una vez más. Sobrepasado el primer tercio de campeonato, el equipo sigue exhibiendo la nauseabunda mediocridad de los últimos años, la planificación hace aguas y los refuerzos que llegaron en verano apenas intervienen en el crecimiento de la entidad.

   Víctor Sánchez del Amo colocó de inicio el mismo dibujo y los mismos hombres que vencieron en el encuentro de su debut como técnico heliopolitano. Hasta ahí, todo correcto. Lo que funciona no hay que tocarlo. El encuentro comenzó con buenas sensaciones y el efecto del cambio de inquilino en el banquillo parecía tener continuidad hoy en Eibar. Pero al cuarto de hora del pitido inicial Ocón Arráiz decidió expulsar a Piccini tras una jugada en la que el italiano forcejeó limpiamente con Inui como último defensor. Si es falta o no puede ser interpretable pero lo que queda claro es que la caída del japonés en ningún caso debería haber supuesto la expulsión del lateral bético. Lo cierto es que la jugada acabó con el italiano en la caseta y, para colmo, la supuesta falta fue ejecutada de forma magistral por Pedro León, quién colocó el esférico por encima de la barrera, haciendo inútil la estirada de Adán. El murciano le tiene tomada la medida al Betis y esta noche tampoco faltó a su cita con el gol. Tres minutos después llegaría el segundo de los armeros. Inui, en una de sus incontables incursiones por banda, colocó un balón en el interior del área que supo aprovechar Sergi Enrich. El delantero granota se anticipó a la zaga y sin dejarla caer batió a Adán. Con el marcador cuesta arriba Víctor decidió retirar del partido a Joaquín, seguramente el jugador más en forma del equipo, y dio entrada a Cejudo. La impopularidad de esta permuta está por encima de su discutible efectividad y eso es algo que, dadas las especiales circunstancias, debiera haber tenido en cuenta el entrenador madrileño. Es de imaginar que, con Piccini expulsado, el técnico quiso cerrar el paso por esa banda pero Castro se quedó como un islote durante casi todo el partido y el equipo lo notó. Hasta el final del primer acto los locales llegaron por oleadas y solo la fortuna y las intervenciones de Adán impidieron un resultado de escándalo. 

   Tras el paso por vestuarios nos encontramos al mismo Betis derrotado y sin pulso observado tras la jugada de la expulsión. Mandi cedió su puesto a Sanabria pero el paraguayo naufragó junto al resto del equipo. Son especialmente preocupantes las escasas prestaciones mostradas por el ariete sudamericano en lo que va de liga, más aún teniendo en cuenta el considerable esfuerzo realizado por el Consejo el pasado verano para su contratación. Los locales amainaron un poco aunque tuvo que ser Adán, sobre todo en una inconmensurable intervención ante Inui, una pesadilla toda la noche, el que mantuviera al equipo con alguna esperanza hasta el final. Los veridblancos, esta noche luciendo la tercera equipación, se aventuraron en un tímido intento de voltear la situación. Ceballos fue el que primero lo intentó de cara al marco rival, con un disparo desde la frontal que Riesgo atajó sin demasiados apuros. Casi a renglón seguido llegó el turno de Rubén Castro, también desde lejos, aunque su chut se marchó por encima del travesaño. En el tramo final de la contienda el canario rompería una mala racha que ya duraba nueve jornadas, al aprovecharse de una mala cesión de Lejeune. Castro recogió el regalo del zaguero vasco, encaró al meta eibarrés y le batió por bajo. Había partido. Sin embargo, este esbozo de reacción quedaría en nada en los minutos de prolongación. Luna recogió en la medular un mal pase de Gutiérrez, se plantó tranquilamente en la frontal y asistió a Pedro León. Adán repelió el remate inicial del murciano pero Kike García, muy atento, cabeceó a la red el rechace y sentenció el encuentro. Pobrísimo bagaje de un Betis mortecino que no debe culpar a las decisiones arbitrales de su paupérrima imagen. El nuevo técnico bético analizó el encuentro y creyó haber detectado cambios positivos en sus hombres y asignó una cuota importante del batacazo de hoy a las decisiones arbitrales. Desgraciadamente para él, el contexto que vive el club desde hace años le apremiará con exigencia en forma de resultados positivos casi de forma inmediata. De otro modo, la manada de lobos se convertirá indefectiblemente en una camada de gatitos abandonados. 

viernes, 18 de noviembre de 2016

Betis vs UD Las Palmas (2-0)


   La era Víctor Sánchez del Amo soltó las amarras esta noche y lo hizo de la mejor manera posible, enganchando a la afición con buen juego y victoria. El equipo evidenció indiscutibles síntomas de mejoría, exhibiendo una imagen diametralmente opuesta a la ofrecida en partidos precedentes, cuando era Gustavo Poyet quien dirigía al equipo, y se hizo acreedor a la victoria desde el pitido inicial. Víctor confeccionó un equipo estructurado sobre una defensa de cinco, con tres centrales, Bruno, Pezzella y Mandi, y dos laterales largos, Álex Martínez y Piccini. Donk, primera vez que actuaba de inicio, se situaba por delante de la defensa, Petros y Ceballos se movían en la medular, Joaquín se ajustaba al dibujo en la media punta y Rubén Castro aparecía como única referencia atacante. Desde el principio el RBB puso más intensidad que el rival, yéndose de forma incontestable a por los tres puntos y sin permitir maniobrar al cuadro de Quique Setién. El técnico cántabro reconoció que el Betis era un equipo hundido pero hoy pasó por encima de la UD Las Palmas por empuje, presión y precisión táctica.

   El aficionado pronto comprobó que muchas veces lo fácil se logra trazando un plan sencillo, sin artificios. La línea defensiva se mostró inexpugnable y casi infranqueable a lo largo y ancho de todo el encuentro, Donk aportó el equilibrio del que adolecía el grupo, el defenestrado Ceballos se fajó como un coloso y dio sentido al juego colectivo, Joaquín mantuvo el nivel que está sorprendiendo a propios y extraños y Rubén, aunque estuvo desacertado y algo desenganchado, volvió a ser feliz. Los laterales estaban siempre auxiliados en defensa y se incorporaban con frescura al ataque. Resulta evidente que el sistema desplegado hoy le viene a Piccini como anillo al dedo ya que minimiza sus carencias atrás y le permite mostrar sus virtudes atacantes. El caso es que este nuevo Betis se comió al rival desde el principio y la grada se sintió identificada con el equipo. Asombró especialmente como los jugadores han sabido interpretar en solo unos días los gestos imbuidos por Víctor. También es cierto que el equipo, salvo en las dos ocasiones generadas a balón parado que decantaron el signo del partido, no se prodigó demasiado de cara al marco de Varas, circunstancia en la que tendrá que trabajar el nuevo inquilino del banquillo heliopolitano. La estrategia, esa parcela del juego tan insólita por estas tierras durante las últimas temporadas, se dio cita a las primeras de cambio. Joaquín, portentoso su despliegue de fuerza y calidad, colocó dos centros desde la esquina que sirvieron para que Bruno y Mandi pusieran al equipo con ventaja antes del descanso. El rival redujo sus virtudes a un par de acercamientos por parte de Boateng y Araujo que Adán supo solventar sin demasiados apuros. 

   Tras el paso por vestuarios los hombres de Víctor supieron contener las intentonas canarias. La labor defensiva comenzaba desde la medular, con Petros y Donk omnipresentes. La eficacia del brasileño se hace más patente conforme avanzan los minutos, cuando las fuerzas del rival escasean. Por su parte, el holandés taponó la salida de balón de los canarios y desahogó el juego en multitud de ocasiones. Vicente Gómez, que salió en la segunda parte, fue el más acertado por parte insular. El mediocentro grancanario demostró sus cualidades durante el tiempo que dispuso y puso a prueba a Adán con un disparo desde la frontal que el meta madrileño atinó a despejar por encima del travesaño. Víctor aguardó hasta el tramo final del encuentro para mover el banquillo. Sanabria sustituyó a Castro a falta de veinte minutos para el final, aunque el paraguayo demostró no encontrarse fino. Musonda reaparecía por un ovacionado Joaquín y en los compases finales del partido Brasanac reemplazó a un agotado Ceballos, que se vació en el verde y el público se lo supo recompensar. Buen encuentro del nuevo Betis de Víctor. No hay que lanzar las campanas al vuelo, solo se trata de un buen comienzo. El equipo cambió el semblante de un plumazo pero queda mucho trabajo por delante, hay que pulir muchos detalles. Trabajo y más trabajo, cero euforia y acostumbrarse a las victoria. 

lunes, 14 de noviembre de 2016

Presentación de Víctor Sánchez del Amo


   Víctor Sánchez del Amo ha sido presentado este mediodía como nuevo entrenador del RBB. El técnico madrileño ha estado acompañado en el acto por Ángel Haro y Miguel Torrecilla, que también han atendido a los medios de comunicación presentes en la sala de prensa del estadio Benito Villamarín. Fue el presidente el que primero tomó la palabra y comenzó agradeciendo a Gustavo Poyet y su equipo por el trabajo desempeñado durante los meses en los que el uruguayo estuvo al frente de la parcela deportiva del conjunto verdiblanco. A continuación presentó al nuevo técnico y afirmó que confía plenamente en que Víctor se va a dejar la piel para sacar la situación adelante. Haro apeló sobre todo a la unión de todo el beticismo para poder lograr los objetivos marcados. Asimismo, Haro recalcó de nuevo los censurables métodos que algunos medios de la ciudad utilizan a la hora de abordar las cuestiones relacionadas con el club y la supuesta campaña mediática existente contra el Betis. Por último, el máximo dirigente heliopolitano emplazó a los medios para dentro de unas fechas en lo referente a las conversaciones mantenidas con Lopera recientemente. Un completo resumen de las declaraciones del presidente ha sido publicado en la web del club y puede leerse ➜aquí


   Víctor compareció por vez primera ante los medios tras completar la primera sesión de entrenamiento al frente del equipo. El técnico ofreció algunas pinceladas sobre su llegada al Betis, su estilo de juego y su inminente estreno en Villamarín ante la UD Las Palmas. Asimismo, el técnico quiso hacer mención a algunos de los pesos pesados del vestuario, como Rubén Castro, al que sitúa inequívocamente en la punta del ataque, o Ceballos y su ostracismo durante la etapa de Poyet como inquilino del banquillo verdiblanco. Además, Confirmó que Alexis colaborará en el campo con él ya que considera que el canario puede colaborar más ahí que en los despachos. El resumen de las declaraciones de Víctor puede leerse ➜aquí


   Por último, Miguel Torrecilla, director deportivo del Betis, atendió también a los medios. El técnico quiso dar la bienvenida al nuevo entrenador bético, declarando que está perfectamente preparado para asumir el reto de dirigir al equipo. También quiso referirse a la destitución de Poyet y la as razones que motivaron su cese, argumentando que una decisión de ese calibre es un arma con la que la dirección deportiva cuenta para el logro de los objetivos. Torrecilla afirmó que fue él quien propuso el cese del uruguayo y analizó como fue el proceso de captación de candidatos y las formas en que se tomó la decisión final. ➜Aquí se puede leer el completo análisis realizado por Torrecilla con motivo de la presentación de Víctor. 




   
   

sábado, 12 de noviembre de 2016

Víctor Sánchez del Amo, Nuevo Entrenador del Real Betis


   Se acabó el culebrón. Tras una semana en la que cada movimiento del Consejo ha supuesto un ridículo más estruendoso, el club ha decidido poner punto y final a la etapa de Gustavo Poyet como técnico del RBB. El técnico uruguayo nunca se pudo hacer con las riendas de una entidad convulsa, no ha sabido manejar los antecedentes y el contexto en el que se encontraba el equipo y acabó arremetiendo contra la afición, los jugadores y todo aquello que viniera a poner en tela de juicio sus pobres prestaciones. Poyet abandona la nave verdiblanca habiendo dirigido al equipo tan solo 11 partidos, consiguiendo 11 puntos y dejando al equipo en la décimo cuarta posición, dos por encima del descenso, con un bagaje de 3 victorias, 2 empates y 6 derrotas, con 11 goles a favor y la friolera de 22 en contra. 

   El club ha aprovechado en este mismo comunicado para informar de la llegada al banquillo de Víctor Sánchez del Amo, técnico que como futbolista triunfó en la época dorada del Deportivo y como entrenador acumula experiencias en el propio equipo coruñés y en el Olympiakos griego, como más reciente aventura. Como anécdota cabe reseñar que el técnico madrileño fue segundo de Michel   cuando dirigió al Sevilla FC, otro de los que entró en el esperpéntico casting organizado por la entidad para la captación del sustituto de Poyet. En mi opinión, el club se ha decantado por el mejor de todos cuanto entraron en la terna por suceder a Poyet y ahora solo queda desearle mucha suerte, apoyarlo denodadamente y ser relativamente paciente con sus métodos de trabajo. Ojalá el viento cambie de una vez por todas de dirección, honestamente creo que esta afición merece que el equipo despegue de una vez por todas. Es una situación difícil de imaginar con estos dirigentes al frente, habrá que mantener la fe y no abandonar la crítica y la protesta.  

domingo, 6 de noviembre de 2016

Villarreal CF vs Betis (2-0)


   El crédito de Gustavo Poyet al frente de este proyecto deportivo que encabeza Miguel Torrecilla estaba agotado para la mayoría mucho antes de que Vicandi Garrido hiciera sonar el silbato que daba inicio al encuentro disputado esta tarde en el Madrigal. Tras la desdibujada imagen exhibida una jornada más por los heliopolitanos no creo que nadie sea capaz ya de discutir un hecho: los días del uruguayo como verdiblamco han concluido. Creo que en ningún caso la destitución de Poyet se puede tildar de decisión apresurada ya que el equipo muestra síntomas alarmantes de abatimiento, no sabe a qué juega, se muestra débil y resquebrajado y no huele la portería rival. Desgraciadamente, el todavía técnico bético nos ha estado sorprendiendo con experimentos inauditos a la hora de conformar las alineaciones, a cada cual más caricaturesca, fruto de su desconcierto e incompetencia. Y este fin de semana no ha sido distinto. Para medirse al Villarreal, uno de los gallitos de la competición, dechado de organización y planificación, Poyet decidió dejar en casa a Ceballos y a Castro en el banquillo. La medular que debía canalizar el juego se erigía sobre las figuras de Petros y Jonas, con Gutiérrez y Cejudo cayendo a bandas. Arriba, Joaquín aparecía incrustado entre la línea de creación y Sanabria, situado como un único punto. En la zaga, Poyet esta vez se decantó por Piccini y Álex Martínez en los laterales, quedando Navarro en el banquillo y Durmisi, ya recuperado, sin convocar. Con este planteamiento carente de juicio pasó lo que tenía que pasar. El Villarreal hizo lo que quiso a lo largo y ancho del partido, manejo la situación a su antojo y solo tuvo que ir madurando el encuentro. Pasados los veinte minutos de juego, Trigueros soltó un zambombazo desde más de 30 metros que se incrustó irremisiblemente en la escuadra de Adán. Es cierto que el Betis no había pasado apuros atrás hasta el disparo del fenomenal centrocampista amarillo pero el resultado era el justo premio al juego desplegado por unos y otros. Carente de reacción, el Betis vivía alejado del marco de Asenjo y comprobaba con impotencia e incapacidad como transcurrían los minutos.

   En el segundo acto aconteció más de lo mismo. Al poco de reanudarse la contienda, un nuevo zarpazo desde fuera del área, esta vez obra de Soriano, duplicó la ventaja castellonense y puso prácticamente imposible la empresa de obtener algo positivo en el encuentro. Con el encuentro visto para sentencia, Poyet redondeó el absurdo con una triple permuta a la desesperada, retirando del choque a Joaquín, Gutiérrez y Sanabria y dando entrada en el terreno de juego a Alegría, Nahuel y Castro. El canario tuvo la ocasión de este modo de disputar su encuentro numero 100 en competición de forma consecutiva, si bien el hito alcanzado llegó acompañado por la penosa y lastimera imagen mostrada por el equipo. Desde ese momento hasta el pitido final el ritmo del encuentro decreció ostensiblemente, en parte porque el Villarreal no precisaba mayores esfuerzos para doblegar sin despeinarse a un Betis cadavérico. En el minuto 70 no llegó el primer disparo entre los tres palos del Betis, un inocente disparo que acabó en las manos de Asenjo sin ningún tipo de problemas. El Consejo debe mover ficha de forma urgente ya que este equipo va camino del precipicio, no juega a nada, no inquieta, no ve puerta. Da pena.

domingo, 30 de octubre de 2016

Betis vs RCD Español (0-1)


   Ruinoso. El Betis de Poyet se ha vuelto a estrellar (si es que alguna vez llegó a alzar el vuelo) y ha ha vuelto a dejar escapar todos los puntos de su feudo, ante un rival vulgar y ramplón. De inicio, El RCD Español se plantó en el verde del Villamarín con la única intención de mantener el orden atrás, ejerciendo una ligera presión arriba para obstaculizar la salida de los locales, algo que logró sin demasiados problemas. El cuadro verdiblanco se presentaba, y no de forma casual, como un equipo plano, sin verticalidad, lento y previsible. Han transcurrido ya 10 jornadas del campeonato y parece un hecho constatado que el técnico uruguayo no tiene ni la más remota idea de lo que tiene entre manos. De inicio, se ha dado cuenta por aclamación popular de que Piccini no debía jugar ni un solo segundo más y que Rubén Castro tiene un sitio reservado en este Betis, sea cual sea el dibujo utilizado. Tan solo falta que comprenda, si sus destitución no llega antes, que en este Betis no hay otro jugador con el perfil de Dani Ceballos (hoy ha tenido que ver el partido desde la grada al ser el descarte de última hora). Con esta falta de personalidad y las salidas de tono exhibidas ante la afición, la prensa y todo aquel que se le ponga por delante, creo que Poyet ha demostrado ya todo lo que es capaz de aportar a la entidad, con lo que bien haría el Consejo en destituirlo esta misma noche y no perder más el tiempo. 

   Poyet optó esta tarde por un 4-4-2, con Rafa Navarro ocupando el sitio de Piccini en el lateral diestro como única novedad en la zaga. De inicio la medular estaba compuesta por Joaquín en la derecha, Petros y Jonas por dentro y Felipe en el perfil izquierdo. Con el transcurso de los minutos el portuense se incrustó en medio, a la vista de la falta de clarividencia de la que adolecía el equipo para mover el balón. Por momentos eran los centrales los que más tocaban el balón y en más de una ocasión a lo largo del choque tuvieron que atreverse a salir fuera de su zona con el balón jugado para romper la presión. Arriba, Sanabria y Castro por decisión popular, se mostraron inoperantes durante todo el encuentro. El partido fue soporífero, infumable para el espectador. Los minutos pasaban y ni uno ni otro se hacían acreedores a nada que no fuera el triste empate que lucía en el luminoso. La falta de recursos de este equipo supuestamente construido para elevar el nivel provocó una vez más el bostezo generalizado en un graderío que despedió a los suyos al término del primer acto con música de viento. 

   Tras el paso por vestuarios los locales parecieron querer imprimir algo de intensidad. El rival no asustaba y solo era cuestión de acosar y prodigarse arriba para que antes o después llegara la ocasión. Pezzella estuvo apunto de lograrlo pero Diego López lo impidió con una gran estirada. Sin embargo, serían los periquitos los que lograrían abrir el marcador, un zarpazo que a la postre sería definitivo. Diego reyes, cabeceando con una facilidad pasmosa casi a bocajarro, ante la falta de oposición de una defensa escasamente contundente, rompió el partido a favor de los españolistas, sin hacer absolutamente nada. Poyet, pertrechado en su caseta hasta el final de la contienda, se vio superado por las circunstancias y sus argumentos para darle la vuelta al marcador fueron del todo inoperantes. Quedaba tiempo por delante pero ni los cambios (Cejudo y Nahuel por Joaquín y Jonas) ni la actitud fueron remedio para resolver la situación. Con casi un cuarto de hora para la finalización ingresó en el terreno de juego el bueno de Álex Alegria, sustituyendo a un Rafa Navarro que cumplió con creces. La entrada del tercer delantero fue una medida a la desesperada pero la meta españolista apenas se vio inquietada. Diego López solo pasó apuros en el alargue, tras un nuevo remate de Pezzella que acabó estrellándose en el palo. Nueva derrota en casa y el grito del respetable fue casi unánime: "Poyet, vete ya". Desgraciadamente, de momento el Consejo no moverá ficha. Pierden el tiempo. 

lunes, 24 de octubre de 2016

José Carlos, Ceballos, Nahuel y Fabián Siguen Aspirando a los Onces de Oro de Futbol Draft


   El comité de Fútbol Draft se ha reunido esta mañana en la ciudad del fútbol de Las Rozas para reducir la nómina de aspirantes que formarán parte de los onces de oro, plata y bronce de la cantera del fútbol español. La lista en categoría masculina ha pasado de 77 a 55 integrantes y entre ellos se encuentran los béticos José Carlos, Ceballos, Nahuel y Fabián.


sábado, 22 de octubre de 2016

CA Osasuna vs Betis (1-2)

   
   La victoria lograda esta noche en Pamplona no deja satisfecho en absoluto al beticismo. Sería muy osado afirmar que el aterrador experimento que propuso Poyet ha dado resultado por los tres puntos logrados ya que el equipo volvió a adolecer de los mismos errores mostrados en encuentros anteriores. No hay que pasar por alto que el Betis se enfrentó a uno de los equipos más endebles de la categoría y por momentos pasó verdaderos apuros para mantenerse en pie. El despropósito comenzó en la convocatoria ya que el técnico decidió volver a incluir en la misma a Piccini, después del penoso inicio que está ofreciendo el italiano. Tampoco se entendió la decisión de dejar fuera a Durmisi pero la sorpresa con mayúsculas llegó con el banquillazo de Rubén Castro, que no era suplente en liga desde hacía dos años y medio. El máximo goleador histórico del club, cuya aportación goleadora continúa siendo la más alta de la categoría, se quedó fuera del once inicial para sorpresa de propios y extraños. No contento con ello, Poyet decidió relegar también a Álex Alegría a la suplencia y fue Sanabria el que se colocó como única referencia en la punta del ataque. Para acabar de encender a la afición, Poyet decidió darle un puesto de titular al discutido Cejudo, formando una nutrida medular junto a Petros, Martin, Gutiérrez y Joaquín. 

   Con esta extraña formación se presento el Betis en el verde del Sadar, intentando romper la mala racha de dos derrotas consecutivas en las que había ofrecido una imagen deplorable. Tras los compases iniciales de empuje local el Betis se hizo con el mando del partido, con Martin haciéndose cargo de la circulación de balón, tratando siempre de conectar con el ataque, no siempre con éxito. Cuando estaba a punto de cumplirse el minuto 20, Petros, omnipresente toda la noche, controló un balón en la zona ancha y colocó el balón por encima de la defensa. Joaquín fue más rápido que su marcador y en un extraño escorzo, de vaselina y de espaldas, perdiendo la referencia del marco, logró abrir el marcador. El portuense se aprovechó de la salida en falso de Nauzet para poner a los suyos por delante y en líneas generales volvió a cuajar un encuentro notable. Salvo en las jugadas a balón parado, donde el equipo sufría en excesivo por culpa de una alarmante falta de envergadura y por una pizarra poco trabajada, los verdiblancos controlaron la situación sin pasar demasiados apuros.

   Tras el paso por la caseta, Osasuna salió a por todas y una nueva desaplicación defensiva de Piccini dio lugar al tanto de la igualada. Berenguer se plantó por banda izquierda en el área sin que el italiano fuera capaz de cerrar la jugada, permitió el disparo del jugador rojillo y el balón, tras salir repelido por el palo, quedó en las botas de Roberto Torres, que fusiló a placer. A renglón seguido, de nuevo Berenguer pudo haber hecho el segundo pero su disparo esta vez se perdió algo desviado junto al palo izquierdo de Adán. Las tornas se habían cambiado y tan solo Joaquín, que acabó extenuado, le daba algo de frescura al equipo en ataque. Tras una buena asistencia de Piccini, el "17" se plantó solo en la portería osasunista pero, después de driblar a Nauzet, no acertó cuando lo tenía todo de cara. El equipo sufría sin el balón y Brasanac, que sustituyó a Martin, tampoco tuvo presencia en la noche de hoy. Sanabria, algo perdido durante todo el partido, gozó de un par de ocasiones para haber puesto a  su equipo de nuevo por delante. Mandi, a la salida de un córner, también puso en aprietos al meta local, con un gran cabezazo. En la recta final del choque Poyet decidió mover el ataque, retirando del encuentro a Sanabria y Joaquín y dando entrada a Castro y Alegría, sin apenas tiempo para lograr algo positivo. Con el tiempo cumplido y cuando parecía que el empate iba a ser el resultado de otro encuentro gris, Felipe Gutiérrez ejecutó una falta desde su casa y el extraordinario chutazo, con la colaboración inestimable de Nauzet, se convirtió en el tanto que le dio los tres puntos a los heliopolitanos. La dinámica perdedora se ha revertido aunque a nadie se le debe escapar que el equipo venció sin convencer. El grupo sigue mostrándose muy blandito y da síntomas constantes de estar poco trabajado. Con esta línea de juego, el equipo huele a sufrimiento y fatiguitas que apesta, confiemos en que la victoria asiente un poco más las ideas y otorgue confianza al equipo.

sábado, 15 de octubre de 2016

Betis vs Real Madrid (1-6)


   Bochorno. Desastre absoluto. El RBB sucumbió estrepitosamente esta noche ante el Real Madrid en su propio feudo, saliendo goleado (1-6) de un encuentro en el que, como describió la propia web del club, cayó por incomparecencia. El encuentro no tuvo historia. Desde los compases iniciales se pudo comprobar que el equipo de Poyet no podía frenar las acometidas de un conjunto madridista que, sin hacer nada del otro mundo, masacró una y otra vez al verdiblanco. Muy pronto llegaría el 0-1, tras el saque de una falta desde el flanco izquierdo que cabeceó Varane sin oposición a la red. Piccini erró una vez más en la marca y permitió que el zaguero francés rematara a placer. Ronaldo y Bale pudieron haber hecho el segundo instantes después, tras sendas ocasiones que se marcharon fuera por muy poco. La medular compuesta por Brasanac, Petros y Martin no podía contener el juego merengue y solo el francés mantuvo el tipo durante todo el partido, sin notarse el largo periodo de actividad provocado por su lesión de tobillo. Defensivamente quedó demostrado una vez más que Piccini no cuenta con el nivel mínimo para jugar en esta categoría, es una situación que no puede pasar desapercibida ni un solo segundo más. Algo parecido sucede con la ubicación a la que el técnico está relegando desde el inicio del campeonato a Rubén Castro, incrustado en banda izquierda y perdiendo buena parte de su presencia de cara al gol. El Betis se acercaba tímidamente al marco de Navas, con un Joaquín en excelente momento de forma que monopolizaba casi todas las jugadas de ataque locales. Castro y Piccini intentaron sin suerte perturbar el estado de placidez en el que vivía Keylor Navas. Sin embargo, una perdida de balón de Joaquín ante Kroos en la medular desembocaría en el segundo de la noche para los madridistas, tras culminar Benzemá una perfecta contra. La escasa tensión y muestras de competitividad se acabaron por ir al traste y de esta forma llegó el 0-3 por mediación de Marcelo, en claro fuera de juego. La última jugada del primer acto culminó la vergüenza que ya soportaba el aficionado verdiblanco, tras una contra donde casi nadie bajó a defender y Pepe asistió a Isco para batir por cuarta vez a Adán. Deplorable.

   Para el inicio del segundo tiempo Poyet decidió sacar del partido a Alegría y Brasanac, dando entrada a Zozulia y Cejudo. Castro se ubicó en su sitio natural (¡Si, Sr. Poyet, entérese de una vez!) y se pudo ver al Betis más incisivo de todo el partido. Diez Minutos después del paso por vestuarios llegó el tanto del honor bético, culminado por Cejudo tras una buena triangulación en la que Joaquín asistió de tacón al cordobés. Pero eso fue todo. Poco después llegaría el quinto blanco, de nuevo por mediación de Isco, que recogió un rechace en el interior del área y colocó el balón con gran maestría en el palo largo. Imposible para el bueno de Adán. Los graderíos comenzaron a despoblarse y parte de los que aguantaron hasta el final comenzaron a entonar el "Poyet, vete ya". Aún restaba el gol de Ronaldo para endosar la derrota más abultada del Betis como local de toda la historia en primer división. Sin creación, sin presión, sin destrucción. Un Betis excesivamente frágil fue asolado ante los suyos por un Madrid que jugó a ritmo de entrenamiento veraniego. Preocupante. Hartos. 

jueves, 13 de octubre de 2016

Bizcocho en el Muro de las Leyendas


   Dentro de los actos encuadrados en el 45 aniversario del debut de Paco Bizcocho como futbolista del RBB, el club ha rendido este mediodía un merecido homenaje al jugador coriano descubriendo el espacio que se le ha reservado en el Muro de las Leyendas. Durante el acto del descubrimiento del triángulo, en el que el mítico jugador estuvo acompañado de su familia y de otros compañeros como Cardeñosa, Rogelio, Esnaola o García Soriano, Ángel Haro quiso dedicar unas palabras al legendario jugador, poniendo sobre todo énfasis en la entrega, honestidad y pundonor que siempre demostró Bizcocho durante todas las temporadas que defendió al conjunto de las Trece Barras, el único equipo a lo largo de toda su carrera. 

viernes, 30 de septiembre de 2016

Real Sociedad vs Betis (1-0)


   El RBB ha caído esta noche en Anoeta (1-0) con todo merecimiento, dejando una pobrísima imagen en la retina de los aficionados y evidenciando serios problemas tanto en la creación como a nivel defensivo. El conjunto txuriurdin fue el único que propuso hoy argumentos para hacerse acreedor a la victoria, contando durante casi todas las fases del choque con el dominio, la posesión y las ocasiones. La medular que dispuso Poyet sobre el terreno de juego se vio continuamente superada y fue incapaz de proponer soluciones. El técnico uruguayo realizó varios cambios en la alineación inicial, unos obligados por los problemas físicos de algunos de sus hombres y otros por decisión técnica. En cualquier caso, el equipo no carburó y se vio sobrepasado durante la práctica totalidad del encuentro por el conjunto donostiarra, que solo pasó algunos apuros en los minutos finales, cuando el esfuerzo físico provocado por llevar el peso del partido les hizo mella. Tras el tanto local, el Betis no tuvo capacidad de reacción para intentar traerse algo positivo, dejando unas sensaciones preocupantes antes del nuevo parón liguero previsto en el calendario para dar cabida a los compromisos de las selecciones nacionales.

   Gustavo Poyet volvió al 4-3-3, con las novedades en la zaga de Álex Martínez y Bruno ocupando el puesto de los lesionados Durmisi y Mandi; en la medular aparecía por vez primera en lo que va de campeonato Dani Ceballos junto a Petros y Felipe y en la punta observábamos la presencia de Joaquín en banda y la dupla Castro-Alegría. El encuentro comenzó con claro dominio realista, siendo los blanquiazules los que tenían la posesión y las pocas ocasiones. Poco antes del cuarto de hora, William Jose cabeceó un centro desde la derecha y obligó a Adán a realizar una gran intervención para evitar el primero de la noche. Instantes después, Joaquín se encargó del lanzamiento de una falta pero el balón salió algo desviado junto al palo derecho defendido por Rulli. A renglón seguido, los locales reclamaron penalti en una acción en la que Pezzella pudo tocar la pierna de Oyarzabal en el interior del área, pero el colegio no apreció pena máxima, a pesar de las quejas que llegaban desde las despobladas gradas de Anoeta. La Real seguía llegando muy fácil y aunque no contaba con ocasiones de cara al marco de Adán, la sensación era de peligro latente. El centro del campo bético era un esperpento. Ceballos no tenía protagonismo, apenas tocaba el balón, Felipe y Petros se veían superados continuamente y cometían errores en la salida del balón. Carlos Vela se aprovechaba de los huecos y su actividad mantuvo continuamente en jaque a los verdiblancos. Entretanto, William Jose puso de nuevo a prueba a Adán pero el meta madrileño reaccionó de nuevo al testarazo del ariete brasileño. Daba la sensación de que los hombres del ataque eran meros espectadores de excepción, hasta que Castro, superada la media hora de juego, se presentó solo delante de Rulli tras una buena transición llevada a cabo por Joaquín y Alegría. Desafortunadamente, el meta argentino de la Real se anticipó abajo y desbarató el peligro. A partir de ahí, los locales perdieron algo de frescura, momento en el que llegaron las mejores ocasiones béticas. Álex Alegría, en una gran maniobra desde la frontal, disparó a la media vuelta pero el balón se marchó junto al palo derecho y casi al final del primer acto, una buena jugada acabó con Álex Martínez en línea de fondo pero su servicio lo cabeceó Rubén Castro por encima del larguero. El delantero canario se quejó de un posible agarrón en el momento del remate pero el colegiado lo que decretó fue el final de los primeros cuarenta y cinco minutos.

   El paso por vestuarios no modificó el escenario y los locales incrementaron más aún, si cabe, su dominio. Brasanac reemplazó en el terreno de juego a un desafortunado Felipe Gutiérrez pero el signo de partido no cambió. El lateral izquierdo Héctor Hernández le amargó la noche a Piccini, que cuajó de nuevo un pésimo partido. Obviamente, no siento especial ojeriza por el italiano pero sus nula prestaciones deben ser denunciadas, sobresalió su pobrísimo nivel dentro de un mal tono generalizado. El rival cuenta con una auténtica autopista por su flanco y dudo mucho que Poyet no se haya percatado ya de esta situación. Sobrepasada la hora de partido Oyarzabal colocó un pase al hueco y ni Bruno ni Piccini, que volvió a fallar en la marca, pudieron frenar la llegada desde atrás de Vela, que solo tuvo que lanzarse para empujar el servicio del prometedor canterano realista. Poyet realizó un extraño doble cambio, dando la oportunidad a Nahuel, que debutaba en el campeonato, y Musonda, en sustitución de Joaquín, el más entonado de su equipo, y Castro. Las permutas no hicieron reaccionar al equipo y solo el desfonde físico acusado por los locales permitió que el juego transcurriera en terreno realista. Aún así, fue Adán el que tuvo que impedir que la Real cerrara el encuentro, primero tras un disparo de Zurutuza que el meta bético detuvo sin demasiados apuros y, sobre todo, en los compases finales, cuando desbarató la llegada de Oyarzabal en un escorzo más propio de un meta de balonmano. Nada de nada, el Betis cayó con justicia y tras el parón nos visitará el Madrid. Hay que entonar un mensaje de autocrítica. ¡Qué poco dura la tranquilidad en Heliópolis! 

viernes, 23 de septiembre de 2016

Betis vs Málaga CF (1-0)


   El RBB ha logrado esta noche una balsámica victoria, la primera del ejercicio en Villamarín, ante un correoso Málaga CF que nunca bajó los brazos. En un encuentro muy accidentado, donde el galeno heliopolitano tuvo que multiplicarse para atender las incidencias que se fueron gestando durante la batalla deportiva, los hombres de Poyet lograron por fin dejar todo el botín en las alforjas gracias a un solitario gol de Joaquín, que se volvió a reivindicar con una actuación sublime que el respetable supo recompensar. El portuense está en un momento de forma francamente envidiable, aportando al grupo grandes dosis de calidad y generosidad en el esfuerzo cuando la ocasión lo requiere. Otra de las caras positivas que nos dejó esta sexta jornada es la confirmación de Álex Alegría como futbolista de primer nivel. El canterano está siendo la gran sensación de este inicio de campaña gracias a su movilidad, verticalidad y juego por alto, virtudes todas que se añaden a su entrega y devoción. El ariete de Plasencia fue vitoreado con todo merecimiento en los compases finales del choque y esta afición si algo sabe es reconocer los destellos de calidad cuando el balón lo empuja alguien vestido de verdiblanco. Hay que resaltar también el caso de otros dos canteranos, en este caso a la inversa. Por un lado, Fabian ha pasado de titular a no ir convocado, resultando incontestable el peso de una realidad que destapa la incapacidad del palaciego para ocupar un puesto en el equipo. Por otro, Ceballos sigue sin contar con la confianza del técnico y de nuevo se quedó sin minutos en el encuentro.

   Gustavo Poyet tuvo que hacer varias permutas en el once de las últimas dos jornadas debido a las bajas, sobre todo en la zaga. Rafa Navarro, jugando a pierna cambiada, se ubicó en el costado izquierdo para suplir a los lesionados Durmisi y Álex Martínez. Bruno, por su parte, ocupó junto a Pezzella el hueco en el eje de la defensa dejado por Mandi, que no llegó a tiempo al envite. El dibujo en esta ocasión era un claro 4-4-2, con una medular formada por Felipe Gutiérrez y Petros, que actuaban por dentro, con dos bandas bien definidas, encarnadas en las figuras de Musonda y Joaquín. Arriba, Rubén Castro, que llegó al encuentro muy justo, tras no haberse ejercitado junto al grupo ni miércoles ni jueves, formaba pareja junto a Álex Alegria. En los preliminares del encuentro la afición quiso mostrar su malestar con el estamento arbitral, alzando de forma mayoritaria unas cartulinas amarillas con las que quiso expresar su disgusto por los puntos escamoteados en lo que va de temporada. Tras los clásicos minutos de tanteo, el Betis dio un paso al frente con una llegada de Navarro por el flanco izquierdo, aunque el lanzamiento final de Petros se marchó desviado. A los veinte minutos llegó el primer contratiempo para Poyet, al caer lesionado Pezzella cuando pugnaba por la posesión con un jugador malacitano. Donk reemplazó al argentino, debutando de esta manera en la competición. El tulipán cuajó un encuentro impecable, aportando altura, contundencia y salida de balón. Los jugadores blanquiazules protestaron al colegiado una jugada donde reclamaban el derribo de Bruno a Juanpi dentro del área. La repetición de la jugada determina que el tinerfeño no solo toca balón sino que el supuesto contacto con el fantástico delantero venezolano del Málaga tiene lugar fuera del área. Acertó Álvarez Izquierdo a pesar de las incesantes protestas de los hombres adiestrados por Juande Ramos. A renglón seguido llegó la jugada del único gol del partido, cuando una jugada por el costado derecho desembocó en un centro perfecto de Musonda a la posición de Joaquín, que cabeceó sin oposición a la red. Tras el tanto bético, el cuadro costasoleño contó con hasta tres ocasiones clarísimas para haber restablecido la igualada en las botas de Kuzmanovic, tras error en la salida de balón de Petros y, sobre todo, de Ricca, que envió el esférico al palo. Tras estos instantes de asedio visitante, el Betis fue capaz de reconducir de nuevo el encuentro al lugar que le interesaba y así se llegó al final del primer acto.

   El paso por vestuarios no propició ningún cambio sustancial en el escenario de la contienda. Aunque el juego era de ida y vuelta, el Betis puedo haber cerrado el encuentro en una rápida contra iniciada por Petros, muy activo toda la noche. El despeje de Kameni a remate de Castro lo recogió Alegría pero el disparo del canterano a puerta vacía fue despejado bajo palos por Miguel Torres. Ambos técnicos comenzaron a mover los banquillos. Por parte bética, Poyet quiso dar consistencia a la medular, colocando a Brasanac en el encuentro en el puesto de Castro, permuta que la grada no acabó de entender. Desgraciadamente, el serbio tuvo que abandonar el partido a los dos minutos de sustituir al canario, tras recibir un fuerte golpe en la cara del que no se pudo recuperar. Sería Cejudo entonces el que saltaría al césped para intentar amarrar el resultado. Por momentos, los locales no consiguieron salir de atrás y la situación le concedió al Málaga alguna ocasión de aproximarse a las inmediaciones de Adán. El meta madrileño vio como el poste se interponía de nuevo en las intenciones de Ricca y tuvo que emplearse a fondo para evitar que el disparo de Juanpi arruinara la primera victoria casera de su equipo. Al final, el Betis consiguió hacer valer el tanto de Joaquín gracias al encomiable esfuerzo de todos los jugadores y a una comunión perfecta con el público, que cedió su aliento cuando peor lo pasaban sus hombres. Importante victoria que, a buen seguro, concederá confianza para los próximos compromisos y asentará a Poyet en el banquillo.

martes, 20 de septiembre de 2016

Sevilla FC vs Betis (1-0)


   El primer derbi de la temporada deparó un choque pobre en lo futbolístico, mucha tensión, polémicas y refriegas constantes. Como casi siempre en los últimos tiempos, el cuadro de Nervión se llevó la victoria ante el eterno rival gracias al solitario gol anotado por Mercado al comienzo de la segunda mitad. No necesitó mucho más el Sevilla FC para imponerse en un partido bronco y carente de brillo, un choque viril de los de antes donde la filigrana no tuvo cabida. El planteamiento de Poyet fue pobre, cicatero, previsible y a todas luces insuficiente para una cita de tanta enjundia. Competir no es suficiente si tu equipo apenas pisa el área rival a lo largo de los noventa minutos. Sobra decir que el gol anulado a Álex Alegría fue completamente legal pero el encuentro ha dejado muchos más detalles que obligan una vez más a hacer autocrítica. El equipo heliopolitano roza la indigencia, su juego es miserable y carente de verticalidad y el respaldo desde el banquillo es sencillamente inexistente. Eso es lo realmente enervante.

   Durante toda la primera mitad la consigna de Poyet fue clara: cederle la posesión al rival y frenar el juego del oponente, proponiendo mucha testiculina y fortaleza en los balones divididos. El recurso atacante pasaba por pleitear los balones puestos en largo, aguardando a que el bueno de Álex Alegría pudiera cazar alguna de las que le llegaba. El Sevilla lo intentó más pero sus argumentos resultaron escasos para poner en apuros a Adán. El juego resultó demasiado atropellado, las interrupciones fueron constantes y el exceso de revoluciones marcó la tónica de una primera muy escasa de vistosidad. Un error grosero de Bruno, que se vio sorprendido por Vietto cuando pretendía cubrir el balón con el cuerpo, pudo costarle caro al Betis pero el ariete sevillista no anduvo acertado de cara al marco. Petros estaba en todos los líos y su exceso de ímpetu levantó la ira de la grada en varias ocasiones. Desafortunadamente, el brasileño se pierde en sus propias carencias y su aportación en la medular casi siempre resulta insuficiente.

   El escenario del partido cambió tras el gol sevillista. A los cinco minutos de la reanudación Nasri botó una falta en tres cuartos y Mercado atinó a tocar el balón entre un bosque de piernas, lo justo para cambiar la trayectoria del balón y batir a Adán. La falta de contundencia defensiva volvió a ser determinante, un lastre que el Betis no termina por erradicar. El equipo se vio obligado a dar un paso hacia delante, era preciso tener más presencia en zona de relevancia para sacar algo positivo de la visita al Sánchez Pizjuán. Ceballos intentó imprimir otro ritmo al partido, el canterano era el único que podía meterle una marcha más al juego. Poco después de que Mercado moviera el luminoso llegó la jugada polémica del encuentro. Rubén Castro, perfectamente habilitado, recogió en el interior del área el pase filtrado de Joaquín y asistió a Álex Alegría, que empujó el esférico al fondo de las mallas. Lamentablemente, el asistente observó fuera de juego en la posición de Castro y el gol no subió al marcador. Minutos después el canario lo intentó desde lejos después una buena triangulación del equipo pero Rico deshizo el peligro con una buena estirada. Vázquez pudo haber puesto más tierra de por medio pero su lanzamiento de rosca se marchó lamiendo el palo derecho. El juego subterráneo, los piques y las brusquedades condujeron al encuentro hasta su recta final y el Betis ya no volvió a inquietar el arco rival. Continúa la racha negativa ante el vecino, el aficionado heliopolitano volvió a enfilar los vomitorios con la cabeza gacha. La mayoría de crónicas vendrán indefectiblemente marcadas por el escandaloso error de bulto del trío arbitral pero esta circunstancia no debe ocultar las penosas prestaciones del juego verdiblanco. Seguramente haya aficionados que no estén del todo descontentos por haber mejorado la imagen con respecto a derbis anteriores, es sin duda el consuelo de los miserables, de los tragones, de los pusilánimes, de los que transigen con todo. La diferencia existente en la actualidad entre ambas entidades es sideral, es posible que sea tanta que  la rivalidad de antaño está quedando destrozada, pero de ahí a tener que conformarse con una derrota digna media un abismo. 

viernes, 16 de septiembre de 2016

Betis vs Granada CF (2-2)


   El RBB hizo méritos más que suficientes para lograr su segunda victoria del campeonato pero un desastroso arranque de partido y la imprecisión de cara al marco rival le impidieron dejar en Heliópolis todo el premio en juego. Fueron innumerables las ocasiones de las que gozó el cuadro verdiblanco para haber remontado un encuentro que se le puso muy cuesta arriba a la media hora de juego. Salió valiente el Betis pero la mordiente le duró a penas 10 minutos ya que a partir de ese momento sería el conjunto adiestrado por Jémez el que tomaría la iniciativa. Veinte minutos de desastre generalizado fueron suficientes para que el Granada CF se pusiera por delante con dos goles de ventaja, un escollo demasiado grande de superar. Poyet apostó de inicio por el mismo once que tan buenas prestaciones le había otorgado en Valencia pero en esta ocasión no se pudieron apreciar ni la intensidad ni la presión exhibida entonces. 

   Como decimos, el Betis salió dispuesto a llevarse el triunfo, de nuevo con un trivote en la medular formado por Petros, Brasanac y Fabián. El juego alocado del brasileño, la inexperiencia del canterano y la poca aportación del serbio fueron cruciales, sobre todo en el primer tiempo. Rubén Castro caía al costado izquierdo, por donde aparecía también frecuentemente Durmisi, Joaquín lo hacía por el ala derecha y en la punta quedaba como estilete Álex Alegría. El canterano realizó un partido soberbio ya que, además de ser el autor de los dos tantos de su equipo, se fajó como un coloso, se ofreció constantemente y enlazó con sus compañeros, valiéndose de su extraordinario poderío aéreo. A los diez minutos de partido, Bueno, que  discurría por el ala izquierda, realizó un desplazamiento de balón en largo que controló a la perfección Carcela. El marroquí se acomodó el cuero a su pierna buena y se aprovechó de la displicencia de Durmisi y los centrales a la hora de cubrir los huecos para, de fuerte zurdazo, introducir el balón en la meta de Adán. El gol cayó como un jarro de agua fría en el graderío. Joaquín intentó la igualada poco después con una jugada marca de la casa pero el ensayo concluyó con un disparo que se perdió junto al palo derecho de Ochoa. El Betis no carburaba, la agresividad y la tensión se habían convertido en desaplicaciones y errores de bulto, como el que dio origen al segundo gol nazarí. Carcela de nuevo enfiló desde el costado derecho, sorteando a cuantos rivales le salían al paso, y, entre la falta de contundencia de la zaga y una serie de rebotes desafortunados, hicieron que el balón cayera en las botas de Bueno. El ariete no se lo pensó y soltó un fuerte chut desde la frontal que batió sin remisión a un desesperado Adán. Cuando peor pintaban las cosas, Rubén Castro asistió de forma impecable a Álex Alegria, que destrozó de un potentísimo testarazo la portería granadina. Quedaba mucho tiempo por delante y el Betis se fue arriba como un ciclón. Pudo incluso haber restablecido la igualada antes del paso por vestuarios pero ni Joaquín, clamoroso su error, ni Castro, a renglón seguido, fueron capaces de concretar las ocasiones. Con Musonda ya en el campo, que ocupó el lugar de un desafortunado Fabián, los verdiblancos ganaron en profundidad y el Granada no era capaz de frenar todo el juego de ataque que proponían los locales. 

   El Betis continuó con esta dinámica al inicio de segundo acto. Las decisiones arbitrales ayudaron a que el césped de Villamarín se convirtiera en una trepidante polvorín. Del Cerro Grande no quiso ver un claro manotazo a Durmisi en el interior del área poco antes de que Joaquín estrellara un balón en el palo tras el bote de un golpe franco. El desorden de la medular no impidió que las llegadas béticas fueran incesantes. Musonda hizo valer su punta de velocidad para marcharse por banda derecha y provocar, justo antes de pisar el área, la segunda tarjeta amarilla para Vezo. Quedaban 35 minutos para darle la vuelta al marcador contra un rival que tenía que afrontar el encuentro con diez hombres. Durmisi y Piccini se incorporaban una y otra vez al ataque y sería precisamente el italiano quien, tras una buena jugada colectiva, asistiría a Alegría que, con un temple y personalidad inusuales, logró por fin restablecer el empate. El conjunto bético aflojó un poco el ritmo y, desgraciadamente, una decisión del colegiado enturbiaría los ánimos del respetable. Con el Betis volcado, el Granada logró elaborar una contra que debió ser invalidada ya que Ponce se sirvió de la mano para controlar en el inicio de la misma. La rápida jugada propició que Atzily se plantara solo delante de Adán y el trencilla apreció penalti en el lance donde el meta bético había logrado rebañar el balón sin tocar al jugador. Las quejas no sirvieron de nada y Ponce se situó en el punto fatídico para lanzar la pena máxima. Sin embargo, el de Mejorada del Campo tenía reservada una de las suyas para mantener vivo el deseo de victoria de los suyos. Por dos veces salvó Adán a los suyos, tras detener el lanzamiento del penalti y en un primer rechace, jugada que culminaría Mandi al despejar bajo palos el segundo disparo de Ponce. La euforia se desató en el estadio con un público enfervorice que volvía a tener fe en la remontada. El Granada comenzó a valerse del juego subterráneo para detener las acometidas béticas, recurriendo a feas entradas que en alguna ocasión desembocaron en tanganas que cargaron de tarjetas a uno y otro bando. Con los nervios a flor de piel, Dani Giménez fue expulsado por culpa de sus airados reproches al juez de la contienda. El tiempo reglamentario se consumía y en una de las últimas aproximaciones al área Felipe Gutiérrez fue claramente derribado, aunque el árbitro esta vez no estimó penalti. La repetición volvió a dejarle en mal lugar y el Betis salió perjudicado de su decisión. Hasta la conclusión, lo intentaron en desbandada Castro, hoy sin acierto ante el arco, y Mandi, que tras recibir un balón de Musonda en posición inmejorable, marró con todo a su favor. Fin del encuentro. El equipo se vació pero una mala primera parte y la falta de calidad de algunos hombres impidieron la remontada. 

miércoles, 14 de septiembre de 2016

La Constructora Heliopol, Encargada del Levantamiento del Nuevo Gol Sur


   El club ha dado a conocer el nombre de la constructora que ha sido seleccionada para la construcción de Gol Sur. Heliopol, empresa andaluza especializada en este tipo de obras, ha sido a juicio del consejo heliopolitano la constructora que mejor ha cumplido los requisitos solicitados, siendo especialmente valorados la solvencia técnica, que diera al Club las garantías de que las empresas tenían la capacidad para ejecutar el proyecto en los plazos y calidades requeridos y la solvencia económica, por la que la entidad tuviera la certeza de que el Gol Sur va a ser ejecutado con las debidas garantías. La ejecución del nuevo graderío estará concluido el próximo 30 de mayo y contará con un precio alzado, fijo y cerrado de 11,5 M€. Además de transparencia, el actual órgano rector verdiblanco quería garantizar que la empresa contratista se comprometiera a contratar para la ejecución al menos a un 25 por ciento del personal cualificado proveniente de la bolsa de trabajo que la entidad había habilitado en la Oficina de Atención al Bético. Sin duda, iniciativa acertada.