El ambiente no estaba tan enrarecido tras las dos últimas victorias en el torneo liguero. El RBB sacó adelante una nueva Junta General de Accionistas de siete horas (acabó a las tres de la madrugada), una vez más, con el peso del paquete principal de acciones que antaño ostentaba Manuel Ruiz de Lopera y a día de hoy representa Francisco Estepa, administrador judicial. Su intervención en realidad fue vital, pues sin su 51,3% ni se habrían aprobado las cuentas del anterior ejercicio ni se habría aprobado la gestión social. Es más, en votos físicos, fueron más las personas contrarias a su gestión que favorables.
Más equilibrada fue la aprobación del presupuesto, de 20 millones de euros para el ejercicio 2014/15. Fue por tanto más protagonista Francisco Estepa que Juan Carlos Ollero, y realmente correspondía al administrador judicial acaparar el protagonismo en un ejercicio del que él fue más responsable, pues es el único consejero superviviente, y así seguirá, pues no hubo cese alguno como consejero por el momento, de los que perpetraron esa gestión. Por eso Estepa estuvo en la diana durante casi toda la junta. Estuvo en la diana de Castaño, de PNB y de algún que otro accionista cercano a Lopera. Y en realidad, al menos momentánemanete, de todo el que escuchara su discurso sobre el balance de la gestión social en el ejercicio 2013/14, porque en el mismo realizó las declaraciones de la Junta, en las que achacó el descenso a Segunda "a la alineación de los astros". Se llevó el cordobés más abucheos que aplausos, que fueron menos en esta junta y se repartieron entre representantes más variados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario