Ceballos anduvo perdido buena parte del encuentro |
Ocho partidos oficiales sin ganar, tercera jornada liguera consecutiva perdiendo y cinco sin marcar, igualando de esta forma la peor racha histórica del club que databa de la temporada 2010/2011, que detentaba el propio Mel. Estos son algunos de los desastrosos datos que arrojan el escaso espíritu competitivo del RBB. El equipo está en caída libre, ha entrado (otra vez) en un bucle de autodestrucción y la destitución del técnico es la solución que muchos (entre los que me encuentro) exigen ya de forma desaforada, posibilidad que será sometida a votación por el Consejo mañana a partir de las cinco de la tarde. El trabajo colectivo es inexistente, la endeblez defensiva y la falta de verticalidad son los moldes que definen el juego y el atasco de cara al marco rival mantiene al equipo atenazado. Tan solo los deméritos ajenos nos hacen mantener una diferencia de cinco puntos con respecto al pozo de la segunda división. El equipo, tras la derrota cosechada esta tarde en el Coliseum Alfonso Pérez de Getafe, ha logrado anotar 20 puntos en su casillero a lo largo de la primera vuelta, cifras que no garantizan el objetivo de la permanencia. Hay varias evidencias, libres de sentimientos cegadores, que el tuitero @BetisStats vuelve a poner al servicio de todos los béticos. En mi opinión, hay una que resulta bastante esclarecedora. Al margen de la espantosa racha, de haber tirado la eliminatoria copera ante el eterno rival, y de poner de manifiesto con sus declaraciones una lamentable falta de criterio y honestidad, Mel es, de los entrenadores con más de cincuenta partidos dirigidos en primera en toda la historia, el que peor promedio de puntuación tiene.
El Betis no fue peor que el Getafe esta tarde. Se notó una ligera mejoría con respecto a encuentros anteriores pero la falta de puntería, entre otras cosas, impidió que el equipo se pudiera traer a Sevilla alguno de los puntos que estaban en juego. Durante la primera mitad el encuentro fue de ida y vuelta, con fases de dominio alterno y bastantes ocasiones en ambas áreas. Empezaron los hombres de Mel jugando en campo contrario, con una dosis de intensidad aceptable aunque poco a poco el Getafe se fue haciendo dueño del juego. Combinaba más y mejor el equipo de Escribá aunque no lograba inquietar la meta de Adán. El meta madrileño solo tuvo que intervenir de verdad en una ocasión durante el primer acto, sacando una pierna salvadora en el área pequeña cuando el remate de Víctor se disponía a besar las redes de la portería bética. Piccini se mostró muy incisivo durante los primeros 45 minutos, con internadas que generaron varios opciones de peligro para los verdiblancos, siempre desperdiciadas por la falta de clarividencia en los metros finales. Fueron varias las ocasiones de las que dispuso el equipo para haber inaugurado el marcador, con un Rubén Castro muy activo pero poco acertado. Molina tampoco estuvo fresco y se le notó la falta de minutos. Pezzella, que volvió a ser titular por la lesión de Westermann, pudo inaugurar el marcador en las postrimerías del primer tiempo, pero su cabezazo fue interceptado in extremis por Guaita.
Tras el paso por vestuarios, N´Diaye, aprovechando el mayor empuje verdiblanco, pudo anotar el primero de la tarde pero su remate en el segundo palo se marchó por poco. Poco después sería Álvaro el que si acertaría con la meta de Adán. Anduvo listo el ariete getafense cuando, libre de marca y sin dejarla caer, acertó a poner en el marcador el que, a la postre, sería el definitivo 1-0. Poco después del mazazo, N´Diaye tuvo de nuevo el gol en sus botas pero su remate fue repelido por el meta azulón. A partir de aquí, el equipo se fue diluyendo tanto física como anímicamente. El juego entró en una dinámica de tedio absoluto y los minutos se fueron agotando sin que la reacción pudiera hacerse efectiva. Mel observaba desde un palco del estadio como el tiempo se perdía sin que nada ocurriera. Un inoperante Van Wolfswinkel relevó en la punta del ataque a Molina y minutos después Joaquín sustituyó a Petros pero el portuense anduvo también perdido y sin energía para generar ocasiones de peligro. Van der Vaart, probablemente el mayor fiasco de la dirección deportiva en lo que va de temporada, demostró de nuevo una inaceptable preparación física para el desempeño profesional de cualquier deporte. Derrota final y en el horizonte aparecen la vuelta copera ante el Sevilla FC el y Villarreal y Real Madrid en liga. Inquietante.
El Betis no fue peor que el Getafe esta tarde. Se notó una ligera mejoría con respecto a encuentros anteriores pero la falta de puntería, entre otras cosas, impidió que el equipo se pudiera traer a Sevilla alguno de los puntos que estaban en juego. Durante la primera mitad el encuentro fue de ida y vuelta, con fases de dominio alterno y bastantes ocasiones en ambas áreas. Empezaron los hombres de Mel jugando en campo contrario, con una dosis de intensidad aceptable aunque poco a poco el Getafe se fue haciendo dueño del juego. Combinaba más y mejor el equipo de Escribá aunque no lograba inquietar la meta de Adán. El meta madrileño solo tuvo que intervenir de verdad en una ocasión durante el primer acto, sacando una pierna salvadora en el área pequeña cuando el remate de Víctor se disponía a besar las redes de la portería bética. Piccini se mostró muy incisivo durante los primeros 45 minutos, con internadas que generaron varios opciones de peligro para los verdiblancos, siempre desperdiciadas por la falta de clarividencia en los metros finales. Fueron varias las ocasiones de las que dispuso el equipo para haber inaugurado el marcador, con un Rubén Castro muy activo pero poco acertado. Molina tampoco estuvo fresco y se le notó la falta de minutos. Pezzella, que volvió a ser titular por la lesión de Westermann, pudo inaugurar el marcador en las postrimerías del primer tiempo, pero su cabezazo fue interceptado in extremis por Guaita.
Tras el paso por vestuarios, N´Diaye, aprovechando el mayor empuje verdiblanco, pudo anotar el primero de la tarde pero su remate en el segundo palo se marchó por poco. Poco después sería Álvaro el que si acertaría con la meta de Adán. Anduvo listo el ariete getafense cuando, libre de marca y sin dejarla caer, acertó a poner en el marcador el que, a la postre, sería el definitivo 1-0. Poco después del mazazo, N´Diaye tuvo de nuevo el gol en sus botas pero su remate fue repelido por el meta azulón. A partir de aquí, el equipo se fue diluyendo tanto física como anímicamente. El juego entró en una dinámica de tedio absoluto y los minutos se fueron agotando sin que la reacción pudiera hacerse efectiva. Mel observaba desde un palco del estadio como el tiempo se perdía sin que nada ocurriera. Un inoperante Van Wolfswinkel relevó en la punta del ataque a Molina y minutos después Joaquín sustituyó a Petros pero el portuense anduvo también perdido y sin energía para generar ocasiones de peligro. Van der Vaart, probablemente el mayor fiasco de la dirección deportiva en lo que va de temporada, demostró de nuevo una inaceptable preparación física para el desempeño profesional de cualquier deporte. Derrota final y en el horizonte aparecen la vuelta copera ante el Sevilla FC el y Villarreal y Real Madrid en liga. Inquietante.
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